¿Cuánta agua deben beber los niños?

Para lograr un crecimiento y desarrollo adecuado durante la infancia es necesario impulsar un estilo de vida saludable. Hacer ejercicio, alimentarse e hidratarse adecuadamente son factores clave.

De acuerdo al  Instituto Nacional de Pediatría el cuerpo de un infante se constituye entre el 65 y 80 por ciento de agua. Al respirar, sudar y orinar un menor pierde de 10 a 15 por ciento de su peso corporal. Esto significa un mayor riesgo de deshidratación.

Los niños tienen mayor necesidad de hidratarse, en comparación con los adultos. Una razón es que los adultos tenemos un menor contenido de agua con relación a la masa corporal y la pérdida también es menor (entre 2 y 4%). Además, los pequeños son más activos y transpiran más.

Por eso es de suma importancia ofrecerles agua y fomentar su consumo desde edades tempranas. Considera que los menores perciben menos la sed y no expresan tenerla cuando están entretenidos jugando.

El requerimiento hídrico varía de acuerdo con factores como la dieta, condiciones ambientales y actividad física. A este respecto, un estudio de  la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), definió como ingesta diaria de agua total promedio adecuada en niños de la siguiente manera:

EdadMililitros de agua por día
6-12 meses800-1000 ml
1-2 años1000-1200 ml
2-3 años1300 ml
4-8 años1600 ml
Niño / Niña (9-13 años)2100 / 1900 ml
Para mayores de 14 años se recomienda el mismo consumo que para los adultos: 2500 ml para hombres y 2000 ml para mujeres.

¿Qué bebidas son las ideales para hidratar a un niño? Lo mejor es el agua natural, la cual ayuda a mejorar la concentración, favorece la memoria a corto plazo y apuntala el rendimiento físico. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), el agua aporta minerales esenciales como calcio, yodo, magnesio y flúor. Además, no contiene calorías, ni tiene efectos adversos y permite al metabolismo realizar sus funciones fisiológicas.

¿Cada cuánto tiempo y en qué cantidad ofrecer agua a tu hijo? Tanto como se requiera. Acompaña todas las comidas de esta bebida y adopta una rutina de consumo desde que despierta hasta que se acuesta. Puede ser un vasito cada dos horas.

Si el menor está deshidratado a causa del calor extremo, de la actividad física intensa o a causa de fiebre, diarrea o vómito, puedes recurrir a un suero oral de grado médico especialmente formulada con agua, glucosa y electrolitos, ingredientes que favorecen la adecuada rehidratación a nivel celular.

¿Se valen los jugos, zumos o refrescos preenvasados? La Organización Mundial de la Salud (OMS), como parte de la Estrategia Mundial sobre régimen alimentario, actividad física y salud los desestima, ya que su consumo en exceso no solo no rehidrata, sino que favorece el sobrepeso, obesidad infantil, diabetes y enfermedad cardiovascular.

Es tu responsabilidad que tu pequeño ingiera agua natural habitualmente. Es la mejor opción. Recuerda que la cantidad y calidad de los líquidos con los que tus hijos se hidraten hoy tendrá un impacto en su edad adulta. Tú eres el ejemplo.

*Especialista en tratamiento nutricional para la obesidad y enfermedades metabólicas.

Referencias:

Agua: la importancia de una ingesta adecuada en pediatría, encontrado en: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0186-23912017000200116&lng=es&nrm=iso#B1

Promoción de alimentos y bebidas no alcohólicas dirigida a los niños: https://www.who.int/dietphysicalactivity/marketing-food-to-children/es/

La jarra del buen beber, encontrado en: https://www.gob.mx/profeco/documentos/la-jarra-del-buen-beber-la-importancia-de-mantenerte-bien-hidratado?state=published